Sangre caliente
Alameda
Mi caballo se desboca
y corre sin detenerse
y corre sin detenerse.
Fuimos desde la colina
hasta el río para verte
hasta el río para verte.
Alrededor de la orilla,
los juncos sueñan ausentes
mientras dibujan tu cara
en sus aguas transparentes.
Su cuerpo quedó desnudo
y se unieron nuestras mentes.
Entre retamas y olivos
surcos de sangre caliente.
Mi alegria por tu llanto
quisiera cambiar
y mis sueños por tu libertad
Yo te quisiera tener
entre mi pecho y mis brazos,
entre mi pecho y mis brazos
Darte toda mi ternura
y un velo de besos blancos
y un velo de besos blancos.
Alrededor de la ...