La Tormenta
AMBKOR
Llegó ese día, puedo sentir las gotas
Ese día en que te hablan y sientes que se equivocan
El alma sigue ahí, pero está rota
Y no sé por qué se rompe si se esconde si la tocan
Me siento solo sin estarlo
Como el náufrago que ya no mira al mar porque no espera ningún barco
Y eso no quita que nos sigan dando
Pero ya no espera que la suerte le regale algo
Será еste día, esta tormenta
Esa llamada quе esperabas que llegara y que no llega
Y por mucho que no llega, tú sigues pensando en ella
Porque lo que no se dice, se queda guardado hasta que te atropella
Será esa estrella que no brilla
O tal vez es mi cabeza la que hace que esté andando de puntillas
No sé si soy fuerte o no soy fuerte
Pero no sé cómo aguanto tantos días como este
Sin mil pastillas, solo con ganas de verme
Sonriendo, como cuando mi papá me hacía cosquillas
En las costillas, le dije que parara siempre
Y ahora que las quiero, no puedo tenerlo en frente
Y le digo a la mente que lo invente
Pero ella inventa lluvias de septiembre a septiembre
Y no sé qué pasa, pero sigo en mi casa, roto
Aunque desde fuera pueda parecerte que lo tengo todo
Me siento solo acompañado
Como el que no quiere amar porque ha sufrido por amar demasiado
¿Y luego qué queda?, ¿tal vez un abrazo?, ¿una hipoteca a plazos?
¿Tal vez una amistad, si somos falsos?
Me sabe todo a fracaso y a mentira
Perdí las gafas de Sol porque pensé que no saldría
Y tras la tormenta llega la calma, decían
Pero me caló tan fuerte que aún veo rayos de día
Y otro psicólogo, y otra sesión perdida (ah)
Y otra vez el consejito de: Disfruta de la vida, que se acaba
Y ya sé que se acaba, lo vi de cerca (ah, sí)
¿O te crees que cuando voy a un entierro no me doy cuenta?
Pasé de niño a adulto demasiado rápido (oh)
Pasé de los muñecos a sentirme uno, de plástico
Pasé de los deberes a lo práctico
De que me hicieran todo a tener que dar lo máximo
Y no estamos preparados para el salto (no)
La vida no es un camino, es un sendero entre barrancos (yeah)
¿Qué será de aquel amigo con el que reía tanto?
A veces pienso en él, pero no llamo (ah)
Y nunca lo hago y me voy de tragos (sí)
Como si quisiera hundirme poco a poco en mi lago (¿cómo?)
Como si el tiempo que me queda fuera una condena
Y esta balanza se inclinará siempre al lado de la pena
Y soy de los que miran siempre el horizonte
De los que dejan una luz a medianoche
De los que tienen miedo y a veces se esconden
De los que temen a los bordes
No soy un cobarde, solo soy un hombre
Que a veces corre sin saber a dónde
Porque la vida se le hace enorme
La muerte le estremece, el tiempo le envejece
Y la lluvia le seduce a la vez que lo rompe