Lo Mismo de Ayer
Diomedes Díaz
Yo no volveré a rogarle amor a una mujer
La que me quiera, la quiero
Y si desea marcharse, dejo que se vaya
Pues no quiero que me ocurra lo mismo de ayer
Que de mi dolor se rieron, sin piedad me hirieron
Muy profundo el alma
Ya sé que es ley de la vida, ganar y perder
Pero cuando uno es sincero
Espera todo menos que el ser a quien ama
Sea capaz de ocasionarnos una herida cruel
Sólo porque le dijeron, que por ahí me vieron
Que con otra andaba
Y sin dejarme siquiera defender
Me juzgó y me condenó como si nada
Y sin dejarme siquiera defender
Me juzgó y me condenó como si nada
Y tanto decirme que era su razón de ser
Que tal si yo hubiera sido una persona extraña
Por eso juré que nunca en la vida
Nadie volvería a reír de mis penas
Por eso juré que nunca en la vida
Nadie volvería a reír de mis penas
Toda la que llegue es bien recibida
Y la que se va, por mí que no vuelva
Toda la que llegue es bien recibida
Y la que se va, por mí que no vuelva
Menos gasto, menos gasto
Como dice el compadre Carlos Rojas
Así es como es, así es como es
Ay compadre Diego Cardona (que baile no)
Tal vez muchos pensarán que resentido estoy
Pero no, yo soy un hombre
Que aprendió a vivir la vida sin rencores
Pero también aprendí que en cosas del amor
Una mujer resentida si usted se descuida
Vivo se lo come
Y eso me llevo a tomar la firme decisión
De estar siempre prevenido
Y nunca más rogarle amor a una mujer
Aún sabiendo que el hacerlo sea mi salvación
Si en mi vida el peor error fue pedirle su amor
Oh Dios cuanto me duele
Gracias doy que soy un hombre de valor
De esos que aunque estén sintiendo que se muere
Gracias doy que soy un hombre de valor
De esos que aunque estén sintiendo que se muere
Levanta la frente, canta alegre una canción
Brinda con un trago y todos creen que nada tiene
Por eso juré que nunca en la vida
Nadie volvería a reír de mis penas
Por eso juré que nunca en la vida
Nadie volvería a reír de mis penas
Toda la que llegue es bien recibida
Y la que se va, por mí que no vuelva
Toda la que llegue es bien recibida
Y la que se va, por mí que no vuelva
Y para uno de mis colegas
José Montenegro
Gracias cacique