Calma
Israel Garabito
Guárdame, en tus preciosas alas
Cúbreme en tus divinos brazos
Aunque se levante el mar y los vientos soplen me civijare contigo
Por encima de la tormenta padre tú eres rey tu permaneces en el
Diluvio y estaré
Quieta y sabré que tú eres Dios
Descansa mi alma en Cristo solamente
Conoceré tu poder en quietud y confianza