En Nuestra Casa
Joan Manuel Serrat
En nuestra casa ya no se oye tu voz, la noche va llenando toda la habitación. Las lilas del jarrón se han ido marchitando en casa. De nuestra casa mi juventud se fue corriendo tras tus pasos, cruzando la ciudad, mientras la soledad me acuna entre sus brazos en casa. En nuestra casa ya nadie enciende el fuego, nadie llama a mi puerta, las horas pasan muertas sin tus manos. En nuestra casa, no soy más que una sombra que no tiene ilusiones.
De golpe me hice viejo, hablo con el espejo y no abro los cajones por no encontrar recuerdos. De nuestra casa que no es mía sin ti, me iré por la mañana sin saber donde ir y volveré a vivir lejos de las ventanas de casa. Y a nuestra casa otras bocas vendrán a borrar nuestros besos y mi triste canción quedará en un rincón, soñando en tu regreso a casa. A nuestra casa...