LA Llave
Kannon
Día gris,
de mi alma no hay gemela,
no apetece estar con nadie,
la gente no es sincera.
Mis penas
ahogadas en cerveza,
todavía flotan,
qué hacer si no se alejan.
Pues verás:
cierra bien los puños
y apriétalos fuerte,
déja de respirar
asta casi ahogarte,
y ahora grita fuerte.
Yo tengo la llave,
yo ya puedo entrar.
Ya me puedo olvidar
de todo aquello que me han hecho.
Yo tengo la llave,
yo ya puedo entrar.
Ya me puedo olvidar
de todo aquello que me han hecho.
Yo tengo la llave.
Deja a un lado lo malo,
abandónalo.
Un día gris,
coloréalo.
De nada sirve llorar,
de nada sirve temer.
De nada sirve, de nada vale.
Una voz sale del fondo del corazón
dice:
Yo tengo la llave,
yo ya puedo entrar.
Ya me puedo olvidar
de todo aquello que me han hecho.
Yo tengo la llave,
yo ya puedo entrar.
Ya me puedo olvidar
de todo aquello que me han hecho.
Yo tengo la llave,
todas las puertas se abren,
los vestidos ya se rasguen,
todas las puertas se abren
porque yo tengo la llave.
Yo tengo la llave.
Yo tengo la llave.
Yo tengo la llave.