Martita
Leo Dan
Era una tarde muy linda,
Cuando conocí a martita,
Estaba a orillas del lago
Sentada en una barquita.
La miré y ella no quiso
Contestar a mi mirada,
Mas después me alejé triste
Con mi alma que lloraba.
Lloraba, lloraba y
Del lago me alejaba.
Lloraba, lloraba y
Del lago me alejaba.
Yo volví dos o tres veces
Para ver si la encontraba,
Pero el destino lo quiso,
Que a su casa me llevara.
Al mirarla la sentía como
Quien siente a su amada,
Le entregué toda mi vida
A través de mi mirada.
Mi alma lloraba porque
Yo en ella no estaba.
Mi alma lloraba porque
Yo en ella no estaba.
Mi alma lloraba porque
Yo en ella no estaba.