La diosa salvaje
Luis Alberto Spinetta
Con la perturbación de la aurora,
la Diosa despertó
y el ave dormitando en el bosque,
trinó junto a las flores
el sol esfera flotante,
al cielo brillará
la luz logró pintar toda la foresta,
y el canto se oye ya :
- Diosa salvaje,
somos tu piel
somos tu cuerpo
cuerpo sin sed
-ah
Y con la melodía del alba,
la Diosa echó a danzar
y aquel violín lejano y canoro
su tallo hace sonar
y los coatíes del monte,
oirán tambien la voz
creando girasoles ocultos,
el sol se agitará
- Diosa salvaje,
somos tu piel
somos tu cuerpo
cuerpo sin sed