El Taxi de Los Sueños
Real de Catorce
Una mañana puedo despertar
desconocerme en el espejo
puedo sentirme fuera de lugar
como un doliente en un festejo.
Quizá me olvide de la calidez
de mi apellido, de tu fama
y pierda el mundo toda validez
en las cobijas de mi cama...
y me aventure a desnudarme
gritar mis broncas y mis miedos
dejar de aparentar lo que no soy
aunque me duela defraudarte.
Una mañana puedo enmudecer
meter mi voz bajo la almohada
oír los pasos del amanecer
entrando sin decirme nada.
Tal vez incendie una cosa más
con la energía de mi alma
y olvide el cuento de sobrevivir
para vivir con las entrañas
y tome el taxi de los sueños
que no haga pausa en el camino
viajar rumbo al "no sé" a puro corazón
levar el ancla y arriesgarme.