Conjuro
Tamara Castro
Una noche, brotó en mi guitarra
Esta zamba qué hoy canto por vos
Y al tocarla mis manos cayadas
Sentí qué temblaban, temblaban de amor
Caprichoso ramal del destino
Qué a mi vida te quiso traer
Como el gajo de un sueño perdido
Qué en tus labios tibios yo vi florecer
¡Qué se parta en dos mi guitarra
Qué se quiebre en pedazos mi voz!
Si estos versos sentidos qué digo
No son el latido de mi corazón
Y si miento, ¡qué venga el olvido
Y lleve esta zamba, qué hoy canto por vos!
Mariposa, fugaz de la suerte
Qué al traerte me quiso alumbrar
Con un cielo de luz transparente
Tus ojos ausentes me hicieron soñar
Como dicen qué todo está escrito
Hasta el día del juicio final
Seguiré la señal del destino
Serás mi camino, mi pura verdad