Despedida de arroz
El Otro Yo
Y cuando venís, en el atardecer, vos me despertás y todo se aclara cuando miro tus ojos.
Y cuando te vas, dejás algo en mi, un perfume fatal, una fragancia mortal.
Nadie pertenece a nadie, todo lo que vemos es irreal.
Como agua entre los dedos, se nos escurre la vida.
Pero sé lo que siento, quiero que estés conmigo ahora, no puedo ser tu dueño,
sólo quiero tenerte cerca.
SOMOS LIBRES COMO EL VIENTO Y SERIA PELIGROSO ATRAPARTE.
Sonreís como el sol, me das el calor, crecés como una flor.
Tu perfume fatal, despedida de arroz, quiero verte brillar en el anochecer.
Y cuando regresa el día y te escapás de mi cama,
esta vez fue sin despedida, como agua entre mis manos.
Por favor no te vayas, todavía no aprendo a soltarte,
sé que no puedo ser tu dueño, pero quiero tenerte.
SOMOS LIBRES COMO EL VIENTO Y SERIA PELIGROSO ATRAPARTE PARA SIEMPRE.